Secuestrando El Grau

Castellón cada día se muere un poquito más, a pesar de los festivales del Viento (¿se dan cuenta que el lenguaje del Régimen Carrasquil se parece cada día más al de Zapatero y su Alianza de las Civilizaciones? Cuando no se sabe gestionar, se invierte en publicidad). Y como quienes están al frente del gobierno municipal llevan mal eso de trabajar, pues se dedican a insultar por redes sociales en lugar de evitar el deterioro de la ciudad. ¡Qué triste ver a una concejal del equipo de gobierno, que cobra más de 60.000 euros (hace un año cobraba unos 14.000 euros), pasarse toda una mañana hablando y contestando por redes sociales!

Ester Giner, concejal del Grao, de quien nadie duda su alto nivel de educación y su tono de voz para nada chillón y chirriante, se entretuvo toda la mañana del martes en atacar en redes sociales a un partido político de Castellón. Suponemos que su abultado sueldo no da para que dedique el preciado tiempo del que dispone a gestionar soluciones para que el Grao, al que representa, no acabe muriendo. Las cucarachas subiendo por los edificios hasta varias alturas, la basura acumulada en los contenedores, las ratas saliendo de las alcantarillas, las aceras rotas por las raíces de los árboles, delincuencia, robos, sustancias adictivas, desaparición de comercios locales, deterioro del mobiliario urbano. Todo eso parece no importarle a Giner. 

En lugar de arreglar el Grao, la susodicha empleó su tiempo en apoyar a una colla festera que ha hecho una pulsera y las vende a dos euros. Bonita iniciativa, por supuesto. Sospechoso que haya gente del PP en esa colla, pero no quita para que la iniciativa sea positiva. ¿Y por qué la apoyó? Pues porque otra entidad privada, el partido municipalista SOM CASTELLÓ, está repartiendo pulseras gratuitas para ensalzar las fiestas del Grao. Unos cobran y otros las hacen llegar al pueblo, a los vecinos, sin esperar nada a cambio (¿Se dan cuenta de la diferencia?) 

El PP salió en tromba a atacar la iniciativa privada y a apoyar la de su colla amiga, en algo que se parece mucho a una presunta prevaricación. Primero resucitó a un zombi, que de eso sabe mucho Begoña Carrasco, para atacar en redes a la otra formación política. El muerto viviente en cuestión fue Vicente Guillamón. Unos insultos por aquí, unas advertencias por allá, unos ataques gratuitos y, zas, bomba de humo para desaparecer.

 A parecer, los populares de Castellón, que están de los nervios, no se sintieron a gusto. Lanzaron a cuatro jóvenes más del partido a seguir atacando e insultado, hasta que apareció, cual estrella de cabaret, la mencionada edil del Grao arrogándose la legitimidad de todos cuantos viven en ese núcleo de población. La verdad absoluta está con el PP y lo demás son impíos que hay que exterminar. 

Los populares se fueron calentando hasta que uno de ellos, con un perfil lleno de fotos del maravilloso equipo de la Carrasco y su pequeño mandarín, amenazó con usar la violencia contra el partido municipalista. Al más puro estilo del manual del perfecto dictador. “¡Ahí van las juventudes hitlerianas a quemar libros, ordenó en su día Goebbels!” La historia siempre tiene hechos que recordar.

Algo debieron temer los populares porque a las pocas horas habían perdido el tiempo en borrar toda señal de los ataques, incluida alguna cuenta propia. Después se han dedicado a apoyar la iniciativa de la colla amiga para tratar de acaparar mayor protagonismo. 

El resultado de la censura, ataque e intimidación popular ha sido que más de dos mil graueros han pedido y recogido las pulseras gratuitas de SOM que enaltecen las fiestas del Grao. Porque el Grao es de sus ciudadanos, de sus habitantes, no de los políticos populares que quieren secuestrarlo. Collas amigas, subvenciones y hasta maridos pregoneros (porque lo del esposo de la Carrasco, nombrado pregonero de las primeras fiestas que organiza de pleno la alicantina que gobierna la ciudad de Castellón, tiene un nombre: nepotismo. Sí, al más puro estilo Ceucescu).

Dejemos a los vecinos del Grao que vivan con intensidad sus fiestas y exijamos al Ayuntamiento que invierta en sus calles, en sus plazas, en sus comercios para evitar que se muera. Vamos, para decirlo claro, que trabajen por los vecinos del Grao, que para eso cobran sueldazos indecentes. 

P.D.: Cuentan que la Carrasco va lloriqueando por las redacciones de los medios de comunicación del poco nivel de sus asesores (a lo mejor también incluye a su edil del Grao). Yo no me lo puedo crees, porque está comprobado que ha elegido a los mejores profesionales de Castellón, personas con mucha experiencia que han dejado sus empleos, donde cobraban mucho dinero, por la miseria que perciben como asesores. La alicantina líder del PP de Castellón estoy seguro que no fichó a conductores de furgonetas negras ni a influencers risueñas ni a pintores de spray.