Jesús Salmerón, candidato del PP a la Alcaldía de Gátova. /EPDACuando meses atrás el PP me propuso ser candidato a la alcaldía de Gátova me invadieron un cúmulo de sentimientos, principalmente de responsabilidad y respeto, pero, sobre todo, de ilusión.
La ilusión es lo que me ha motivado a aceptar el reto convencido de que, junto a la lista que me acompaña, vamos a dotar a nuestro pueblo del impulso que necesita para ofrecernos las infraestructuras y servicios que hasta ahora no hemos tenido.
Gátova es maravillosa, lo sabemos todos los que somos de aquí, quienes vivimos y también quienes acuden a visitarnos. Pero para que nuestra querida Gátova no se quede atrás necesita tener una asistencia médica estable, y para que esto sea una realidad, trabajaremos sin descanso hasta que nuestro pueblo tenga una ampliación del horario y el personal del servicio médico. Es algo fundamental, ya que la amenaza de la despoblación, empieza por la pérdida de servicios básicos, y os puedo garantizar que jamás permitiré que eso le suceda a Gátova.
En los últimos meses hemos sufrido una constante amenaza: los incendios. Y es que a pesar del drama que sufrimos el pasado verano, este invierno no se ha trabajado lo suficiente para preparar nuestro entorno para combatir el fuego este próximo periodo estival. Porque los incendios se evitan con precaución y previsión, por eso tendré un espíritu reivindicativo cada día del año para que nuestros montes reciban el mantenimiento que requieren, y los servicios forestales tengan las herramientas y refuerzos que necesitan para que sigamos disfrutando de este paraje tan maravilloso que es nuestra montaña y su entorno natural.
Mi ilusión es enorme, pero esa ilusión no tendrá su mejor momento el 28 de mayo, cuando todos vivamos la fiesta de la democracia en nuestras calles, sino cuando vea florecer los proyectos y mejoras que juntos vamos a conseguir para Gátova.
Porque precisamente nuestras calles necesitan una revisión y un lavado de cara. Empezando por la carretera, tan olvidada por los gobiernos de la Generalitat estos años y cuya mejora se ha quedado a medias. Es imprescindible que empiecen ya las obras de la CV-25 para que nuestros vecinos, familiares y amigos puedan acceder a nuestro pueblo sin ser un constante peligro, y que dejemos de estar en inferioridad respecto a otros municipios de nuestro entorno.
Ese espíritu reivindicativo del que anteriormente hablaba será replicado también para traer a Gátova un centro de día, y os aseguro que, a ilusión y amor por lograr beneficios para Gátova, nadie me va a ganar.
Ilusión por Gátova, eso es lo que siempre he sentido, ilusión por nuestras tradiciones, por nuestras calles, por nuestros vecinos. Ilusión por no dejar de verla brillar cada día y, sobre todo, una ilusión enorme por trabajar los próximos cuatro años para que, juntos, hagamos nuestro pueblo un lugar cada vez más maravilloso.
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