Las Cooperativas Eléctricas de la Comunidad Valenciana
han conmemorado hoy su centenario. Se trata de un sector de la economía social líder
en España, ya que supone el 85% del
total del cooperativismo eléctrico nacional, y del que forman parte cerca
de 50.000 socios.
De
las 20 cooperativas eléctricas existentes en España, 15 están asociadas a la
Federación de Cooperativas Eléctricas de la Comunidad Valenciana,
para hacer frente a los problemas surgidos a lo largo de su existencia. Su
ubicación: 9 en la provincia de Valencia (Algimia de Alfara, Castellar,
Guadassuar, Alginet, Chera, Sot de Chera, Vinalesa, Meliana, Museros,), 4 en
Alicante (Catral, Crevillent, Biar, Callosa de Segura) y 2 en Castellón (Almenara
y El Serrallo de Castellón).
Esta
es la radiografía del sector que el presidente de la Federación, Antonio Mª Roca
de Togores, ha presentado en el acto de celebración de los cien años de actividad de la Cooperativa Fluido
Eléctrico de Museros, una empresa referente en el ámbito del cooperativismo
eléctrico.
Antonio
Cejalvo, director general de Energía de la
Conselleria de Economía, Industria, Turismo y Empleo ha
presidido este encuentro en la localidad de Museros, en el que han participado
cientos de cooperativistas.
Según ha destacado Antonio Mª Roca
de Togores, el cooperativismo eléctrico valenciano tiene un gran
peso específico dentro de la economía social y representa un claro ejemplo de buena gestión
empresarial. Se trata de un sector que ha resistido a los vaivenes de la
economía, así como a las continuas dificultades impuestas por las normativas oficiales
y por la competencia de las grandes empresas. “La unión de las cooperativas y el servicio a la sociedad ha sido el
detonante para no ser absorbidas por las grandes compañías,quenunca
han apostado por invertir en políticas de desarrollo local”.
Centradas
en la distribución y comercialización de energía eléctrica, el valor diferencial
de esta fórmula es la cercanía del socio
con la cooperativa eléctrica, a diferencia de la impersonalidad en el trato con
las grandes eléctricas. Asimismo, ofrecen a sus socios precios, en
ocasiones, más económicos que las grandes compañías.
Las
cooperativas locales de distribución y comercialización de fluido
eléctrico surgen a principios del siglo XX para resolver el problema de abastecimiento de
suministro en núcleos de población de difícil acceso. Unas nuevas redes de
distribución locales en las que las grandes compañías eléctricas de la época no
invertían al no resultar rentables.
Desde
entonces, este modelo empresarial ha demostrado que la economía social puede competir perfectamente con la economía privada.
En la actualidad, y a pesar de la delicada situación económica, las
cooperativas eléctricas mantienen sus
plantillas, un equipo humano imprescindible para poder prestar un servicio
de calidad a sus 49.273 socios, a través de instalaciones de su propiedad que
suponen un total de 1.195 kilómetros
de líneas de distribución (945 de baja tensión y 250 de media). Cuentan con
416 centros de transformación que suman una potencia instalada de 224.494 Kw.
y dos subestaciones con una potencia
de 80 Mw. Todo ello para garantizar un suministro
de calidad a sus socios, ascendiendo la potencia suministrada a 265.274.585
Kw./año.
Destaca
también la importante labor social de las cooperativas en beneficio de los
habitantes de los municipios donde desarrollan su actividad. Su obra social abarca desde la concesión
de becas a estudiantes de educación primaria, secundaria y superior (2.931
concedidas en 2012), ayudas a 24
a AMPAS, bonos de comida para escolares, hasta patrocinios
culturales y deportivos a más de 250 asociaciones, fomento de la lectura con la
puesta en marcha de bibliotecas y servicios de Internet y telefonía fija. Asimismo,
resalta la ayuda a personas con discapacidad, tercera edad y asociaciones
benéficas.
Para el presidente de la Federación “estos datos ponen en alza los valores que
nos caracterizan como cooperativistas como son la mejora del bienestar de los
ciudadanos y la generación de empleo y riqueza”.
100 AÑOS DE SUMINISTRO ELÉCTRICO A MUSEROS
Fundada en 1913, la Cooperativa Fluido Eléctrico Museros, SCV, fue una
de las empresas pioneras en el ámbito del cooperativismo eléctrico valenciano,
y su creación posibilitó el acceso a la energía eléctrica de todos los
vecinos de la localidad, incrementando notablemente su calidad de vida. En la
actualidad, abastece de energía a dos de
cada 3 vecinos de Museros (de un total de 4.700 habitantes), a los que
suministra anualmente 6.200.000 kw anuales a través de sus 33 kilómetros de
líneas de distribución de baja y media tensión y 12 transformadores.
“Este centenario demuestra que la
apuesta de futuro que iniciaron nuestros antepasados por una fuente de energía
al alcance del pueblo y por el pueblo sigue, hoy, siendo una lección que no hay
que olvidar y en la que debemos perseverar. Sólo así honraremos la memoria de
aquellos que creyeron que las luces de la modernidad eran accesibles para
todos, con el esfuerzo de todos, y para el pueblo que somos todos”, ha
destacado Miguel Ángel Gimeno, presidente
de la cooperativa de Museros.
Comparte la noticia
Categorías de la noticia