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Desde Casinos: vivimos un 19 de marzo, el día de San José, desde el recuerdo a la esperanza
CRONISTA OFICIAL DE CASINOS
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JOSÉ SALVADOR MURGUI - 19/03/2020
Falla de Casinos que pasó a la historia
Nuestras hondas raíces valencianas, nos llevan a recordar las fiestas en honor al patrón de Valencia, al del Gremio de Carpinteros y al de la Iglesia Universal. La fiesta de José se celebra en un día señalado para todos los valencianos. Este año que hemos vivido ñustas fiesta mayores de forma diferente. Es un buen momento para recordar cómo ha sido nuestra fiesta a lo largo de los años.
En la primera Visita Pastoral a la Parroquia Santa Bárbara de Casinos, que firma don Pedro Baeza el 24 de abril de 1792 ya nos habla de la ampliación de la iglesia, y en esa reforma queda construido el altar de San José. El día 9 de enero de 1809 “se dio sepultura eclesiástica y en esta Iglesia, en la Capilla del Patriarca San José, al cadáver de José Murgui y Civera, casado con Bárbara LLavata (José Murgui, es el mecenas del Altar de San José, según se hace constar en el Acta de la Visita Pastoral de 1807), José Murgui y Bárbara LLavata, fueron abuelos de Andrea Murgui Muñoz, esposa de Juan Rocher, I Alcalde de Casinos, al independizarse de Lliria en 1843.
Por tanto estamos hablando de una fiesta arraigada profundamente en el calendario litúrgico de Casinos, ya que se ha mantenido hasta finales del siglo XX una tradición cuyo origen se remonta al siglo XVI que consiste en dedicar los siete domingos anteriores a la fiesta de San José, donde se contemplan los siete dolores y gozos del Patrono de la Iglesia y se le cantan estas melodías propias del tiempo litúrgico.
Las fallas en Valencia empezaron a plantarse a finales del Siglo XIX. Hay escritos que nos dicen que 1870 se persiguió duramente los festejos populares como el Carnaval y las Fallas. Esta presión provocó que en 1885 surgiera un movimiento en defensa de las tradiciones típicas, otorgando la revista "La Traca" premios a los mejores monumentos falleros. Este hecho provocó la competición entre los vecinos y dio lugar al nacimiento de la falla artística, donde no desaparecía la crítica, pero predominaba la preocupación estética. En 1901, el propio Ayuntamiento de Valencia, otorgó los primeros premios municipales a las mejores fallas.
En 1928, la Banda Unión Musical Casinense estreno su primera bandera para ir a las Fallas de Valencia y acompañar a la Falla de la Plaza del Doctor Collado.
En 1930, se planta una falla imitando a las de Valencia en la Plaza de Mosén Juan Murgui, hoy plaza Gabriel Esteve que los artistas son un matrimonio que vivía en Casinos, llamados Ricardo y Carmen, “Devora” que con la ayuda de la familia de los “Barberillos” que vivían al principio de la Calle de San Vicente, y que recrearon en pinturas de la época escenas y vistas del pueblo como la Plaza Mayor y la Iglesia, la Balsa, el Calvario y los cipreses, la ermita de San Roque, todo ello bajo un avión y rodeado de ninots. Esa falla aún es recordada por las personas más mayores de la población, y también recuerdan que hubo Falleras para celebrar ésta fiesta.
En 1952 con motivo de la construcción de la Bodega Cooperativa, en la calle de san Vicente en 1953, en el lugar donde se celebraban “els miracles”, Rosario Faubel y los vecinos recrearon una escena fallera, criticando a los corredores de vino y los abusos que cometían en la compre venta de nuestros caldos, y en la falla se presentaba un ninot haciendo pasar por el aro a un pajarito con esta leyenda: “Com la gavia es tan gran, i el ocell (el pardal) tan xicotet, no ens fanran pasar per l ´aro, com hasta ara en ho han fet.” Era la armonía de aquellos años.
En 1953 la hermana Maria Barber, bordó en el taller de la Casa de las Obreras de la Cruz en la Calle Mayor 5, la Bandera de la U. M. C. para que nuestra banda la estrenara en las fiestas Josefinas de Valencia.
En 1960 se vuelve a plantar otra falla en la Plaza del Rosario, fundando una comisión fallera integrada por los vecinos de la Calle de San José y cuantas personas quisieron formar parte. Los artistas falleros eran todos del pueblo, consiguiendo hacer una gran fiesta. Hecho este que se repite en 1961 y con motivo de esta fiesta y en honor a Casinos, Rafael Sempere, el médico del pueblo, y acreditado acuarelista, pinta el Escudo de Casinos, que fue presentado al pueblo en la actual Plaza Mayor, siendo Alcalde Domingo Vidagañ y a continuación fue paseado por las calles en un vistoso pasacalle acompañando a las Falleras y Comisión la Banda Unión Musical Casinense.
En esos años el día de san José se hacía un matinal musical cultural en el Cine Moderno, con motivo de la fiesta y felicitación al Cura Párroco José Formentín Peñalosa, en el que participaban los niños y jóvenes de Casinos, cantando, bailando y recitando poesías.
En 1969 los alumnos de la Academia del Patronato Parroquial, también hicimos una Falla que plantamos en la Plaza de la Iglesia, recuerdo que hicimos un cohete a la Luna, informábamos de que las calles de Casinos estaban sin asfaltar, y como ninot indultado pensábamos salvar una guitarra de cartón que nos había dibujado el profesor de pintura y médico Rafael Sempere, y que fue pasto de las llamas.
En 1972 y 1973, las Obreras de la cruz, impulsaron durante dos años, el ambiente fallero para atender a la juventud y personas que se quedaban en Casinos y no podían ir a las Fallas a Valencia, creando una popular fiesta, pero las personas van pasando y los tiempos cambiando, y así llegamos a unos años de inactividad fallera.
En 1988 nace la Falla “Pensat i fet”, que ha llegado hasta hoy, también en los años 1980-90 nació otra Falla “El Tro”, que no pudo llegar al hoy. Eran años bonitos donde Casinos tenía dos fallas.
En este mini recorrido histórico, no me quedo anclado mirando el pasado, aquello es historia y recuerdo, digno de ser repasado en las crónicas de la época en el caso de que existan, lo importante hoy es mirar al futuro, mirar ese mañana luminoso y radiante que volverá a alumbrar un nuevo amanecer.
Hoy desde los balcones y las calles a las 12 horas, tras un solemne volteo de campanas desde la Iglesia Parroquial, sonaba con fuerza el pasodoble “Amparito Roca” y una vecina decía: “Que fallas tan tristes…” no he podido resistir contestarle: “¡Hay que coger impulso para el 2021!” ¡Valencians tots a una veu: Quédate en casa y vamos a ganar esta batalla! Somos fuertes como la pólvora.