El sindicato CSIF ha presentado hoy denuncia penal ante el
Juzgado de Instrucción número 4 de Valencia “contra todas aquellas personas que
por su condición de autoridades y responsables de Conselleria de Sanitat
Universal i Salut Pública de la Generalitat y de cualquier otra instancia pudieran resultar criminalmente responsables”.
El sindicato señala en el escrito ante el juzgado que la falta de protección al
personal sanitario podría constituir, entre otros, delito de prevaricación por
omisión.
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF)
relata en la denuncia interpuesta que “en fecha 31 de enero de 2020, CSIF presentó
escrito dirigido a la Consellera de Sanitat en el que le requería a informar al
personal que presta servicios en instituciones sanitarias sobre los pasos a
seguir y el protocolo que esté elaborando ante la propagación del coronavirus,
así como a suministrar los equipos de protección individual (EPI) que
correspondan para garantizar la seguridad de los empleados públicos”.
CSIF continúa explicando en su escrito que “ante la inactividad
de la Conselleria de Sanitat, el sindicato presentó un nuevo escrito a la
Comisión Sectorial de Seguridad y Salud laboral de la Conselleria de Sanidad
Universal y Salud Pública, el día 27 de febrero de 2020, antes de la
celebración de la reunión de esa comisión. En este documento se reitera lo
expuesto en el 31 de enero de 2020 y se deja constancia, además, de algunos
centros concretos en los que faltan medidas de protección o éstas son
insuficientes. En la misma línea se presentó escrito a la Comisión Sectorial de
Seguridad y Salud laboral, en fecha 5 de marzo de 2020”.
La central sindical recalca que “a pesar de las recomendaciones
de la OMS, de la declaración de emergencia sanitaria internacional, de las
recomendaciones del Ministerio de Sanidad al respecto, y de los escritos
presentados por CSIF, Conselleria de Sanitat incurrió en una evidente
inactividad”.
El sindicato subraya que esa inactividad “se constata de
manera evidente y se pone de manifiesto con la falta absoluta o la ineficacia
de los medios de protección puestos por dicha Conselleria a disposición del
personal que presta servicios en instituciones sanitarias. Esta falta de medios
es pública y notoria, y ha dado lugar a un elevado número de contagios entre
profesionales sanitarios e incluso al fallecimiento de varios de ellos. Este
personal infectado representa más del 15% del total de casos de contagios en la
Comunidad Valenciana”.
CSIF recuerda en la denuncia que “la obligación legal de
proteger a los trabajadores por parte de la empresa, o en este caso
administración empleadora, implica también la obligación de dotarles de los
medios preventivos necesarios para que realicen su trabajo en las mínimas
condiciones de seguridad”.
La central sindical hace hincapié en que “tal obligación
está siendo incumplida de manera palmaria por la administración denunciada desde
el primer momento de enfrentar la epidemia. Como consecuencia de su inactividad
y falta de previsión pese a los antecedentes que conocía o debía conocer, ha
provocado que sus profesionales sanitarios hayan estado y estén trabajando con
batas permeables, chubasqueros, bolsas de basura, sus propias gafas, gafas de
buceo y aquellos otros medios que se les ocurre agudizando su ingenio para
protegerse frente al Covid-19 y evitar la propagación de la enfermedad ante la
pasividad de la Administración”.
El sindicato recalca que en esta crisis sanitaria “la
administración denunciada no ha hecho entrega de EPIs ni del resto de material
como mascarillas FFP2 y FFP3, gafas de protección, calzas específicas y
contenedores grandes de residuos, que permita trabajar a sus empleados en
condiciones de protección de su derecho a la salud e integridad física, a fin
de evitar ser contagiados por los pacientes o aumentar el riesgo que los mismos
sufren y evitar la propagación de la enfermedad”
CSIF esgrime que esa inacción de Conselleria “podría ser
constitutiva de un delito de prevaricación por omisión tipificado en el
artículo 404 del Código Penal, de un delito continuado contra los derechos de
los trabajadores previsto y penado en los artículos 316, 317 y 318 del Código
Penal, así como de tantos delitos de lesiones y homicidios imprudentes como
trabajadores hayan resultado contagiados o fallecidos por el virus COVID-19,
como consecuencia de la inacción y falta de previsión de la administración
sanitaria autonómica”.
El sindicato recuerda el drama que han supuesto “la
inactividad e imprevisión de la Conselleria de Sanitat, desatendiendo las
instrucciones de la OMS y del propio Ministerio de Sanidad, al no haber
facilitado a sus trabajadores los medios de protección necesarios para la
seguridad. Ha llegado hasta el punto de ocasionar entre sus profesionales un
elevadísimo porcentaje de afectados por la infección, que ha sido causa de
graves lesiones y del fallecimiento en algunos casos”.
Comparte la noticia
Categorías de la noticia