Dos personas observan el tablón de anuncios del ayuntamiento de Canet esta mañana. FOTO M. MARTÍNEZ Canet
d'En Berenguer ya cuenta con dos nuevos administrativos y otro auxiliar
de administrativo después de un cuanto menos polémico proceso de
exámenes. En plena crisis, el Ayuntamiento ha tirado hacia adelante
unas oposiciones que se iniciaron en la anterior legislatura y que el
PP ha decidido seguir, un proceso tutelado por el secretario municipal,
José Antonio Sancho, presidente del Tribunal a quien el actual alcalde
y el anterior han delegado la potestad de desarrollarlo. El resultado
no deja de ser sorprendente por el perfil de las afortunadas: la mujer
del tránsfuga socialista, Amparo Peruga, la ex trabajadora de La
Gaceta, Cristina Duarte y la secretaria de la jueza de Paz, Inmaculada
Ferri, imputada por el TSJ tras cobrar bodas ilegalmente. Queda
desierta una plaza de auxiliar, ya que el Tribunal ha repartido ceros a
los demás aspirantes.
El proceso lo inició el equipo de
Gobierno de la anterior legislatura, siendo alcalde Octavio Herranz, y
lo ha continuado su sucesor, el popular Leandro Benito. Pero ambos
delegaron en el secretario municipal para que dirigiera el proceso.
José Antonio Sancho es el presidente del Tribunal, como también lo es
de la plaza de Técnico de Gestión -todavía por convocar oficialmente-,
en la que concurren, entre otros, la ex alcaldesa de La Pobla de
Farnals, Natividad García; el hijo del alcalde de San Antonio de
Benagéber, Ángel Cañizares o la secretaria actual del alcalde y también
ex trabajadora de La Gaceta, quien ya ganó una plaza de funcionaria,
Mar Antoni de la Piedad.
Se da la circunstancia de que para las
dos plazas de administrativo han aprobado Inmaculada Ferri y Amparo
Peruga. Ferri es la secretaria de la jueza de Paz de Canet d'En
Berenguer y hermana de la que fue concejala del PP en la pasada
legislatura, Alejandra Ferri. Tanto Inmaculada, como la jueza de Paz y
la suplente, están imputadas por el TSJ de la Comunitat Valenciana por
un presunto delito de
cohecho al cobrar, presuntamente, por la celebración de bodas civiles.
Un funcionario público no puede recibir ningún pago. El
TSJ las acusa de cobrar por "la realización de lo que se califica como
"paripé", consistente en ''una actuación casi teatral de celebración
del
matrimonio que tenía como escenario el restaurante donde se celebraba
el convite". En su momento, uno de los propietarios de uno de esos
negocios reconoció ante el juez que ''la jueza de Paz celebraba entre
12 y 15 bodas al año'' en su negocio. Las susodichas se enfrentan a una
inhabilitación durante un número indeterminado de años, cuestión que no
impediría, en caso de condena en dicho sentido, que accediera a su
puesto de administrativo pasado el tiempo preceptivo.
No
es el único caso polémico en el proceso de exámenes. Otra de las
aprobadas ha sido Amparo Peruga, trabajadora del Ayuntamiento de Canet
d'En Berenguer y mujer del edil tránsfuga del PSPV, Carlos García
Mingarro, ahora en el equipo de gobierno del PP. Aunque el ex alcalde
socialista, Octavio Herranz, tenía que haber terminado el proceso de
las oposiciones en la legislatura anterior, al final el tercer examen
quedó pendiente. Así se lo recomendaron y así lo hizo. Al ganar las
elecciones el PP, fue cuando García Mingarro fue fichado por los
populares y ascendido a concejal del equipo de gobierno y teniente de
alcalde. Amparo Peruga es la que mejor nota ha sacado, un 7.
Si
curioso es el caso de los administrativos, el de los auxiliares no se
queda atrás. De los siete que se presentaron a la última prueba, sólo
una ex trabajadora de La Gaceta, periódico muy vinculado a Canet d'En
Berenguer, desde donde se promovió su nacimiento, ha aprobado la
tercera prueba con un ajustado 5. Cristina Duarte, natural de Torrent
pero afincada en Sagunto, es la nueva auxiliar administrativa del
Ayuntamiento de Canet. El resto de los aspirantes han sacado un cero y,
por tanto, una de las plazas curiosamente queda desierta y por cubrir,
pese a que el Ayuntamiento tiene presupuestadas dos. Ni Esther Bosque Uviedo, ni Miguel Ángel Chordá,
ni José David García, ni Juan Miguel González, ni Cristina Lluesma, ni
Miquel Rubio, han pasado la criba. Todos han sacado un cero. Queda en
el aire, por tanto, la continuidad en el Consistorio de Miquel Rubio,
quien trabaja de auxiliar en el Ayuntamiento, y de Miguel Ángel Chordá, también empleado en el Ayuntamiento.
Todos ellos
realizaron el pasado 17 de abril el supuesto práctico por escrito, que
metieron en un sobre lacrado para que ayer, miércoles 2 de mayo, lo
transcribieran en Word. Lo hicieron en un ordenador del Consistorio, en
distintas horas del día, en lugar de hacerlo a la vez, por ejemplo, en
la sala de informática del colegio. Sólo estuvo presente el presidente
del tribunal y secretario municipal, José Sancho, quien a primera hora
de la mañana de hoy ya había puntuado los ejercicios.
Fuentes
municipales del Ayuntamiento de Canet d'En Berenguer han evitado
valorar las pruebas y han defendido que ''el procedimiento viene de la
anterior legislatura, en la que gobernaba PSPV, EU y Bloc''. Además,
han señalado a este periódico que no tienen
intención de paralizar ningún proceso pendiente, pese a la crisis y los
vientos de recortes que
vienen del Gobierno central de Mariano Rajoy.
(Ampliaremos la información en la edición impresa del viernes 11 de mayo).
Comparte la noticia
Categorías de la noticia