Renfe y Adif suspende en la Comunitat Valenciana. Y es que, a las empresas públicas estatales, se les empiezan acumular una lista de tareas pendientes en un territorio que parece olvidado para el Gobierno de Sánchez.
En esta línea, muchos son los proyectos que, a los ojos de los valencianos, se eternizan sin llegar a ver la luz, también los servicios ineficientes, las comarcas todavía sin conectar y las dotaciones que, incluso, generan problemas de inseguridad en las zonas rurales.
el corredor que no llega
El Corredor Mediterráneo es la infraestructura ferroviaria de doble plataforma en ancho internacional y con alta velocidad que discurrirá desde la frontera francesa hasta Algeciras, uniendo así a Europa las provincias de Castelló, Valencia, Alicante.
La dotación, que está llamada a impulsar la economía, el turismo y el empleo, no parece estar entre las prioridades del Gobierno Central, y deja a los usuarios con el servicio actual: un conjunto de vías en mal estado, en un circuito inacabado
El proyecto, con más de 20 años de retrasos acumulados en sus obras, no avanza a buen ritmo. Y es que, Adif debe tener terminado para 2023 las conexión de las tres capitales de la Comunitat Valenciana en ancho internacional, además de la activación de los tramos entre Almussafes y Fuente de San Luis y Moixent y L'Alcúdia, y la entrada a Murcia. Además de otras conexiones tanto al norte con al sur de la Comunitat.
Los técnicos ferroviarios que colaboran con #QuieroCorredor, Francisco García Calvo y Xavier Lluch, aseguran que al ritmo al que van las obras, dichos plazos no se van a cumplir y además advierten de que el túnel pasante de Valencia "amenaza con ser el semáforo de Europa si las obras no se aceleran".
Las vías dividen Valencia
Precisamente, la falta de esta infraestructura es la que provoca que los vecinos de Valencia tengan una ciudad partida en dos ante una infraestructura ferroviaria que cruza la capital.
La enorme playa de vías sigue sin soterrarse impidiendo proyectos como el parque central o la nueva estación del AVE, además de dejar barrios a merced de la falta de conexiones y la degradación.
Y esto es algo que no parece que vaya a cambiar a corte plazo. Sobre todo, ante la falta de financiación prevista en los próximos años para las infraestructuras del túnel pasante y el canal de acceso, las dos intervenciones que pondrían fin a esta situación.
El túnel pasante, con un presupuesto total de 2.000 millones, no recibirá en 2023 más que una inversión de 1,5 millones. Una cifra todavía más baja a la prevista en las cuentas de 2022, donde se calculaba que en el próximo ejercicio la inversión se elevaría hasta los 10 millones.
Tampoco se anticipa una mejoría inmediata para los próximos ejercicios: 3 millones para 2024, 4 millones para 2026 y 4,7 para 2026. Unas ínfimas cantidades para un proyecto que debe poner solución a la división que sufre la capital, cosiendo la misma a través de unas vías subterráneas.
Otro proyecto paralelo al túnel pasante es el canal de acceso, cuyas súplicas tampoco son atendidas por el gobierno liderado por Pedro Sánchez
La actuación que elimina la playa de vías en el acceso ferroviario a Valencia tiene un presupuesto total de 530 millones de euros. Las cuentas generales destinan tan solo una partida directa de 9,6 millones para 2023. Y de hecho, acaba dándose una realidad inusual, y es que dado que debe sufragarse en un 50% por el Estado y el otro 50% a través de la Generalitat y el Ayuntamiento, el montante municipal directo para este ejercicio acabará siendo mayor que el del Ejecutivo central, lo que evidencia la diferencia de importancia en el proyecto.
capital, sin llegar al mar
Si los anteriores proyectos ferroviarios parecían contar con un presupuesto reducido, todo parece una gran cantidad frente a la partida reservada para el túnel de serrería.
De hecho, el proyecto que debe permitir la finalización del Jardín del Turia y la ejecución del PAI del Grao, en la zona este de la ciudad, no recibirá ni un euro por parte del Gobierno Central para este año, ni tampoco hay reserva para los próximos.
Y es que el túnel de serrería parece estar sumido en el eterno estudio sin llegar a ver la luz nunca. Todo ello, mientras otras ciudades ven como poco a poco las vías desaparecen de su entramado urbano permitiéndolas crecer urbanístcamente.
cercanias colapsado
El servicio de cercanías en la Comunitat está completamente colapsado. Un servicio lento, impuntual, que sufre cancelaciones y que hacina usuarios en las horas punta. De poco han servido el "plan de choque" anunciado por Fomento que se tradujo en unos pocos parches que no ponían solución al problema: la falta de convoys, conductores y la renovación de las infraestructuras.
El malestar entre los usuarios es tal, que les ha llevado a crear la plataforma 'Indgnats amb Renfe', encargados de organizar las concentraciones #XiulemPelTren.
La plataforma cifra en 7.543 las cancelaciones de trenes de Cercanías y Regionales por falta de personal, material o mantenimiento del material y reclama priorizar las inversiones, reestructurar el servicio, material en condiciones y planificar la electrificación de las líneas que queden.
Asimismo, plantean la rehabilitación y adecuación de las estaciones, con personal, accesibles e información de incidencias fiable y actualizada a tiempo real.
Eterno viaje a Castelló
El funcionamiento del servicio que conecta Valencia con la provincia de Castelló sigue generando problemas. Los años pasan y los usuarios siguen sin poder disfrutar de un servicio de calidad que responda a sus necesidades. Y esto se debe a los retrasos continuos que se repiten todos los días de la semana y que causan importantes perjuicios a los ciudadanos.
Se trata de una de las líneas que más quejas recibe por las continuas anulaciones de trenes en hora punta..
Y es que, en más de una ocasión los trenes previstos no llegan a partir y dejan tirados a muchos usuarios que acaban llegando tarde al trabajo, las escuelas o las citas médicas.
interior olvidado
Pese a que la "despoblación" se erige como una piedra angular para el Gobierno central, la realidad sigue su curso, al menos en lo que a conexiones de Renfe se refiere. Y es que, muchas son las comarcas rurales de la Comunitat que siguen sin tener infraestructuras ferroviarias y obligan a sus vecinos a desplazarse con vehículos privados o servicios de autobús de dudosa calidad, y que en muchos casos solo disponen de un servicio al día.
En Castelló, la comarca del Alcalatén, el Alt Maestrat y Els Ports no tienen servicio de tren en sus pueblos, por lo que tienen que hacer kilómetros de carretera para poder llegar a una estación ubicada en otra comarca de la provincia. En Valencia, la Serranía o el Rincón de Ademuz tampoco disponen de este tipo de conexiones, agravando la situación de una
Comunitat a dos velocidades.
Aquellas zonas de interior que cuentan con una maltrecha red, tampoco es que tengan un gran servicio. De hecho, en las comarcas del interior la Plana de Utiel-Requena, la Hoya de Buñol-Chiva y el Valle de Ayora-Cofrentes solo cuentan con una línea ferroviaria, la línea C3, que cuenta solo con 33 trenes todos los días dentro de esta línea, pero solo ocho de ellos llegan a Utiel y solo cinco trenes hacen todas las paradas. Las localidades que apenas conocen el servicio de Renfe dentro de esta línea son: Venta Mina, Siete Aguas, El Rebollar, Requena, San Antonio de Requena y Utiel.
Peor suerte corren municipios como Venta del Moro, Sinarcas, Chera, Villargordo del Cabriel, Cofrentes, Zarra, Ayora, Yátova o Godelleta los cuales no conocen ningún tipo de conexión.
También en La Ribera Alta y Baja se producen problemas de este tipo. Solo nueve municipios de 47 están comunicados por Renfe. El resto como Benicull de Xúquer, Antella, Sumacàrcer, Tous, Montroi, Montserrat o Turís, no cuentan con este servicio.
O en Camp de Turia, donde la única estación existente se encuentra en la Reva-Loriguilla, muy poco utilizada precisamente por su lentitud. Para los 20km que separan el municipio de Valencia el viaje puede durar hasta 60 minutos en tren, mientras que en coche, este mismo trayecto es de 20 minutos.
Adiós a Aranjuez - Utiel
El pasado 8 de enero de 2021 se canceló la línea de tren Madrid-Cuenca-Utiel-Valencia dejando así a municipios como Camporrobles sin servicio de cercanías para toda su población. Abandonada tras años sin las inversiones necesarias e inoperativa desde que el temporal Filomena acabó de destrozar la deteriorada infraestructura, Ábalos prometió que pasaría a convertirse en una nueva 'vía verde', que tampoco ha llegado. "Vamos a luchar por recuperar el servicio ferroviario de Cercanías, porque es vital y somos el último pueblo de la provincia de Valencia, no se puede abandonar a los pueblos, nos vacían poco a poco", afirmaba la alcaldesa Inma Alemany.
Morvedre, punto negro
La conexión ferroviaria con el Camp de Morvedre continúa, después de décadas de reivindicaciones, bajo mínimos. Viajar desde Sagunt, undécima ciudad más poblada de la Comunitat Valenciana e importante polo económico, hasta Valencia, Castelló, Madrid, Barcelona o Aragón es una auténtica odisea, no solo por la poca frecuencia, sino por la mala combinación y los largos tiempos.
La línea que une Sagunt con Zaragoza, cuatro paradas de la cual están en el Camp de Morvedre, se ha encontrado en un estado lamentable durante años. Vías deformadas, taludes erosionados, cunetas llenas de tierra y rocas o traviesas rotas son algunos de los problemas de la línea férrea. Todo ello, unido a la baja frecuencia. Tan sólo cuatro trenes al día unen Estivella, Albalat dels Tarongers, Gilet o Algímia d'Alfara con Sagunt (uno menos los fines de semana). Un tren más al día hay desde estas localidades hasta Valencia.
Otra deficiencia importante para el Camp de Morvedre tiene que ver con la conexión de Sagunt con Castelló o Valencia. Si bien no hay problemas demasiado relevantes en lo que a frecuencia respecta, el tiempo del trayecto ha aumentado de manera considerable en las últimas tres décadas; cada vez es más lento. Hace treinta años, viajar desde Sagunt hasta Valencia costaba poco más de media hora. Ahora, son hasta 48 los minutos que se tarda.
Por otro lado, el tren al Port de Sagunt no arranca. Este núcleo urbano es el único de la Comunitat Valenciana con más de 20.000 habitantes (45.000) sin acceso en tren. La estación actual está en Sagunt, teniendo menos habitantes, lo que hace que se produzcan alrededor de 13.000 viajes diarios en coche desde el Port para conger el tren.
Los incendios en el Palancia
La falta de limpieza en los márgenes y taludes del trazado de la vía de ferrocarril en la línea Sagunt-Teruel que atraviesa las comarcas del Camp de Morvedre y del Palancia, es el principal problema con que se encuentran los convoyes. El ministerio ha reconocido recientemente ser esta la causa de un total de 23 focos de fuego en los tres últimos incendios que se han producido principalmente entre Viver, Caudiel y Jérica.