El pleno de Les Corts ha validado este martes el decreto del Consell sobre medidas extraordinarias de apoyo a las personas vulnerables para paliar los efectos de la inflación, que incluye el 'Bono cesta de la compra', las ayudas para hipotecas variables y la ampliación del bono alquiler.
El decreto ha sido convalidado con el voto favorable de los partidos del Botà nic -PSPV, CompromÃs y Unides Podem- y el apoyo de Ciudadanos, aunque esta formación ha cuestionado, junto al PP y Vox -que se han abstenido en la votación- que estas medidas se hayan presentado a un mes de las elecciones.
El conseller de Hacienda, Arcadi España, ha sido el encargado de presentar el decreto-ley que, ha defendido, es una medida de "solidaridad y unión y de no abandonar a ningún valenciano" ante las consecuencias económicas de la guerra de Ucrania, como la inflación.
También ante la restricción monetaria por parte del Banco Central Europeo para normalizar las comisiones, con siete subidas de los tipos de interés que repercute en las hipotecas con interés variable de muchas familias, y que puede suponer unos 1.500 euros de media de encarecimiento en un año, ha señalado España.
Estas medidas impulsadas por el Gobierno valenciano tienen como objetivo sumarse a las medidas de otra administraciones y ayudar a paliar este "doble reto" de la subida de los precios de los alimentos y de los tipos de intereses hipotecarios.
El bono de 90 euros para la cesta de la compra, dirigido a valencianos con rentas bajas, que no superen los 21.000 euros, que ha sido solicitado ya por 110.000 personas y se espera beneficiar a unas 500.000 familias, ha indicado el conseller.
El decreto contempla también la ayuda de hasta 600 euros para compensar el incremento del tipo de interés de hipotecas variables para la adquisición de vivienda habitual, que beneficiarán a unas 30.000 familias con rentas medias y bajas, y la ampliación del bono alquiler joven.
España ha pedido a todos los grupos el apoyo a unas medidas que "ayudan a las familias más vulnerables" y son fruto del "diálogo" entre los agentes sociales y sindicatos.
El diputado del Partido Popular, Rubén Ibáñez, ha lamentado que "hemos pasado de los 'ximoanuncios' a los 'ximobonos'" y a su juicio son fruto de la "desesperación electoral" del president de la Generalitat.
Ibáñez ha señalado asimismo que hay que leer "la letra pequeña" de estas medidas y ha advertido de que el presupuesto para su puesta en marcha saldrá de las retribuciones del personal de la Generalitat, "recortando la partida de los funcionarios".
Por su parte, el diputado de Ciudadanos (Cs), Fernando Llopis, cuyo grupo ha validado finalmente el decreto, ha criticado que el Gobierno valenciano "empobrezca" a la clase media y a los autónomos, que "cada vez pagan más y reciben menos" y ha considerado estas medidas como un "anuncio electoral".
En el mismo sentido se ha pronunciado al diputada de Vox, Llanos Massó, quien ha considerado que "nadie puede oponerse a darle 10 céntimos a nadie" pero estas medidas, ha afirmado, "no son la solución a los problemas" de la inflación.
A juicio de Massó, "mientras el resto de partidos están preparando sus folletos para la campaña electoral, el president Puig lo hace en el Diario Oficial de la Generalitat", que ha calificado como un "folleto electoral".