La reciente devastación provocada por la DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) en la Comunidad Valenciana debe ser un punto de inflexión en la gestión gubernamental de Carlos Mazón. La emergencia desencadenada ha puesto de manifiesto no solo la vulnerabilidad de nuestra infraestructura y servicios, sino también la urgente necesidad de un cambio en la estructura del Consell, particularmente en la provincia de Valencia.
Carlos Mazón, como presidente de la Generalitat Valenciana, tiene la responsabilidad de liderar un gobierno que no solo gestione crisis, sino que también esté preparado para prevenirlas. La situación actual demanda una reevaluación de los consellers que representan a la provincia de Valencia, con la incorporación de perfiles técnicos que cuenten con la experiencia y formación necesaria para navegar en la complejidad de situaciones de emergencia como la vivida. Menos alicantinismo y menos perfiles polÃticos por cuotas y amistades. No podemos permitir que la ineficacia y la desorganización se repitan.
Los desastres naturales ponen a prueba la capacidad de respuesta de cualquier administración. La incapacidad de algunos consellers, especialmente la de Interior, para coordinar acciones efectivas durante la crisis actual ha dejado a muchos ciudadanos preocupados y en pie de guerra. Con razón. Un enfoque basado en la técnica y en el conocimiento profundo de gestión de crisis es lo que ahora se necesita. Esto implica no solo redesignar a autoridades que no han estado a la altura, sino también buscar expertos en gestión de emergencias, urbanismo y medio ambiente que contribuyan a una respuesta más robusta y eficiente.
La recuperación no tardará en llegar a la agenda, pero la prevención debe ser nuestro mantra. Crear un plan integral que contemple infraestructuras resilientes y una gestión proactiva de recursos es vital. Este plan debe incluir la participación de entidades locales y expertos en la materia, asegurando que todas las voces sean escuchadas en la toma de decisiones.
En resumen, la crisis que enfrentamos no debe verse solamente como un desastre, sino como una oportunidad para transformar la Generalitat Valenciana. Carlos Mazón tiene en sus manos la posibilidad de reforzar su gobierno mediante la incorporación de consellers que no solo sean competentes polÃticamente, sino que también comprendan las realidades técnicas y operativas de la gestión en situaciones adversas. La historia nos juzgará por la forma en que respondamos a esta crisis y por cómo estemos preparados para enfrentar los desafÃos futuros.