Javier Más (1971) es Doctor en Historia y miembro de la Real
Academia de Cultura Valenciana. Director de Máster en la Universidad Europea de
Valencia y apasionado por la investigación educativa, ha emergido en los
últimos meses como un referente fundamental en la literatura histórica
española.
La última novela de Javier Más ha irrumpido con fuerza en el
panorama literario español como una de las más vendidas. Autor valenciano, se
muestra contento de reivindicar "la importancia que tuvo nuestro reino en el
proceso de formación de España".
Con un estilo ágil, una narrativa rápida y una escritura sin
complejos ha logrado revolucionar la novela histórica hasta convertir a la
mujer en epicentro del debate literario. Su última novela, Reina de Sangre (editorial Almuzara), ha sorprendido a crÃtica y
público con la introducción de nuevos recursos literarios en un género
demasiado encasillado.
¿Cómo defines tu
estilo literario?
El estilo literario es algo que deben etiquetar los
lectores. Yo escribo para entretener y, sin que se den cuenta, mostrar trazos
de la historia. Una lectura que no es capaz de enganchar al lector hay que
abandonarla.
¿Ha evolucionado a lo
largo de los años?
Por supuesto. Hoy ni se me ocurrirÃa publicar algo que
hubiera escrito en el pasado. Si un autor no evoluciona, no aprende
constantemente, será incapaz de conectar con el lector. Siempre debemos pensar
que nos falta mucho por recorrer.
¿Cómo equilibras la
documentación histórica con la ficción en tus novelas?
El ochenta por cien de lo que escribo es realidad. ¿para qué
ficcionar algo si la realidad siempre la supera? El proceso de investigación es
prácticamente el mismo que si fueras a escribir un ensayo. Lo diferente es el
estilo en el que escribes las conclusiones. Ese estilo te permite crear una
atmósfera especial para tratar de que el lector se meta de lleno en ella. Hay
que persuadir siempre a quien tiene tu libro entre las manos.
¿Cuáles son los
perÃodos históricos que más te inspiran y por qué?
La Edad Media es un perÃodo infinito donde todo, desde el
amor hasta el sexo, desde la polÃtica hasta la violencia, se vivió con una
intensidad desbordante. Esas pasiones a flor de piel son inspiradoras, sin
duda. Además, en España, es una etapa donde la mujer tuvo un papel determinante
y miró de tú a tú al hombre. Eso es algo desconocido que hay que empezar a
poner en valor. Es una etapa sobre la que hay tanta oscuridad que, cuando
enciendes una luz, descubres un mundo apasionante.
¿Por qué tus últimas
novelas han tenido de protagonista a una mujer?
Porque la fuerza de una mujer, incluso la valentÃa, es muy
superior a la de los hombres, en términos generales. La mujer debe sobreponerse
a las mismas circunstancias que rodean al hombre y también a éste. Eso hace que
sus vidas se conviertan en torrentes de una intensidad digna de admiración. La
mujer como género, no como grupo social. Vale lo mismo para una campesina que
para una reina del siglo XIV.
Hablas sobre todo de
mujeres, ¿Hay algún personaje histórico femenino en particular que te gustarÃa
explorar en profundidad en futuras novelas?
La verdad es que cada novela me abre a nuevos personajes. En
el fondo, los descubro casi a la vez que el lector. Es apasionante. Pero si hay
que nombrar a alguna mujer, me encantarÃa investigar sobre Catalina de
Lancaster, la reina de Castilla y esposa de Enrique III. Una mujer cuyo
matrimonio fue pactado cuando era una niña y que, como consecuencia, tuvo que
ser educada en la nueva corte hasta la mayorÃa de edad, sola, sin padres, sin
familia. Un personaje fuerte que supo, además, reinar y ser una gran madre.