Música,
transgresión, risa, parodia, monólogos, humor y mucha diversión. Estos son los
ingredientes del Kafre Teatre 2012, que tendrá lugar en Picassent a partir del
miércoles 22 de febrero. Un año más, el Ayuntamiento de la localidad apuesta
por la cultura en valenciano y para valencianos. Como afirma el concejal de
Cultura, Jaume Sobrevela: "Los valencianos tenemos nuestra singular manera de
ser y de hacer. Esto es el festival kafre, un festival de teatro -este año
valenciano y principalmente en valenciano- que durante cuatro días nos permite
a los picassentinos huir de la cotidianidad y revolcarnos de la risa".
Precisamente, ese es el principal objetivo del certamen, conseguir que el
público se olvide de sus problemas durante unas horas y disfrute del
espectáculo. El kafre cumple ocho años en escena, este año sin figuras
mundiales como Jango Edwards o Leo Bassi, protagonistas de otras ediciones,
pero con Xavi Castillo como referencia de un festival adaptado a la crisis: "La
situación económica actual no es para reírse. Por esto, partiendo de la
prudencia, del rigor y la responsabilidad, hemos diseñado un festival adaptado
a los tiempos que corren y que ha visto reducido su presupuesto en un 50 por
ciento", explicaba Sobrevela.
El showman valenciano Xavi Castillo y la compañía Oscura Teatro –con su "Totes
mortes"- serán los platos fuertes de esta edición en la que también participan
Cascai Teatro, Pau Blanco y Pepa Cases. Mientras otros consistorios gestionan
la crisis mediante recortes en el sector cultural, en Picassent se continúa
apostando por el "bienestar intelectual", así lo define el regidor de Cultura,
como fuente de progreso. Así, el Kafre Teatro continúa "cumpliendo con una de
las funciones del teatro –según afirma Vicent Tronchoni, gestor cultural del
Ayuntamiento de Picassent- que es parodiar a la sociedad y a las personas
contemporáneas, criticar las estructuras de gobierno y a los propios
gobernantes, provocar las emociones más humanas: la risa, el llanto, la
polémica".
Un año más, pues, Picassent apuesta por el teatro más atrevido e irreverente
con lo políticamente correcto. Por sólo dieciséis euros, todos los espectáculos
además de una camiseta diseñada por Lluis Sánchez, artista
valenciano-australiano. En esto, el Kafre sí que es internacional.
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