El secretario de Políticas Públicas y Protección Social de CCOO, Carlos Bravo, ha defendido este jueves en València que el acuerdo de la segunda fase de la reforma de pensiones conduce a preservar el actual sistema, tanto para las generaciones actuales como para las futuras.
Bravo ha participado en una asamblea de CCOO PV para explicar este acuerdo y ha señalado que la opción que adopta esta reforma es la de "incrementar el esfuerzo en la incorporación de más ingresos para poder pagar las pensiones durante los próximos años".
Esto difiere, según ha destacado, de la reforma de 2013, "que lo que hacía era disminuir el gasto incidiendo en el recorte de las pensiones actuales y futuras y, por tanto, la cobertura".
Bravo ha explicado que hay una transferencia de renta de beneficios empresariales a retribución del trabajo, por lo que "va a haber una mayor cotización empresarial para financiar las prestaciones de la Seguridad Social, lo que significa una transferencia de rentas del capital a las del trabajo, justo lo contrario que ha ocurrido en Francia".
La reforma de 2013, ha dicho, "apostaba por que nuestros jóvenes cotizaran como sus padres para recibir una pensión entre un 25 % y un 30 % inferior, mientras que la reforma actual "mantiene el sistema no solo para las generaciones actuales, sino para que cuando lleguen los años 2050 y sucesivos, las más jóvenes, aun siendo menos numerosas, encuentren el mismo sistema de pensiones que contribuyen a mantener".
Para la secretaria general de CCOO PV, Ana García, este acuerdo es "histórico", y ha destacado que esta segunda fase se haya centrado "en los ingresos y también en reducir la brecha de género que existe cuando se llega a la edad de jubilación".
Ha explicado que en la Comunitat Valenciana, la pensión media de los hombres está en 1.216 euros y la de las mujeres en 814, lo que supone que las mujeres perciben un 33 % de pensión media menos; por ello, ha dicho, "aquí, la reforma de las pensiones va a tener un impacto muy positivo".
García ha apuntado que en un contexto económico inflacionista, de incremento de precios, "es muy importante que se pudiera asegurar la situación de las personas mayores con esa revalorización de las pensiones, que, en el último año, ha sido del 8,5 %".
Ha indicado que si la primera fase (acometida en julio de 2021) se caracterizó fundamentalmente por la garantía de poder adquisitivo de las pensiones, en esta segunda, con la mejora de ingresos y la reducción de la brecha de género como ejes prioritarios, "aseguramos más ingresos al sistema y blindamos la protección social de nuestras pensiones".