Asà lo anunciaba Pablo Casado. Un llamamiento a activar
España generando un gran proyecto nacional, "abierto de par en par a una
sociedad a la que es necesario escuchar para obtener su confianza. Ese es
nuestro camino y vamos a convocar a millones de españoles a que lo recorran con
nosotros. Solo por esta senda recuperaremos el futuro que merece España". Toda
una declaración de intenciones desde el liderazgo de una formación con vocación
de gobierno. Porque los gobiernos Populares le sientan bien a España y con
ellos les va mejor a los españoles. Con ellos y sus propuestas económicas,
imprescindibles para afrontar las crisis generadas por la Izquierda, hemos
superado dos recesiones generando 7 millones de empleos. Esa es la mejor
polÃtica social, que ahora se vuelve a resentir gracias al populismo
social-comunista y las veleidades nacionalistas del sanchismo.
Tras el acuerdo histórico de la UE, en el que ganamos todos
y fortalecemos ese espacio común, no podemos dejar pasar esta oportunidad para
invertir bien esos recursos, sujetos a reformas y con condiciones. Un acuerdo
que frena al populismo dándole un baño de realpolitik, cortando de raÃz
las contrarreformas que el neomarxismo buscaba imponer. Un acuerdo trabajado
conjuntamente con el Partido Popular Europeo, que ha liderado la negociación de
los Fondos Europeos y donde la estrategia de demandas de Sánchez era
cuestionada por sus propios correligionarios socialdemócratas, evidenciando la
fractura dentro de la propia izquierda europea.
De ahà la importancia del llamamiento de Pablo Casado en el
segundo aniversario de su llegada a la Presidencia del PP. Desde la coherencia
y el compromiso de representar la única alternativa de gobierno a la deriva
actual, tendiendo puentes y aportando la experiencia en la gestión para
reactivar el crecimiento económico y la creación de empleo, una vez más. Con
propuestas que apuestan por bajar los impuestos y acometer una importante
reducción del gasto público superfluo e ineficiente. La caÃda del PIB nos
anticipa ya un desplome histórico. La pérdida de riqueza en estos cuatro meses
supera ya toda la sufrida durante la crisis de 2008, lo que supone la
destrucción de la clase media, los grandes castigados una y otra vez, el
desplome de los ingresos públicos y un gasto público disparado. Nos volvemos a
encontrar ante una nueva crisis, peor que la anterior y con el peor gobierno.
Una coalición social-comunista que vive del caos y el drama social y económico
para imponer su dictadura ideológica, rompiendo todos los grandes consensos de
la Transición.
Una vez más tendemos la mano presentando y ofreciendo un
decálogo de medidas económicas con las "recetas" que siempre han funcionado:
reformas, solvencia y estabilidad. Solo asà podremos afrontar con garantÃas
esta nueva crisis. Apuntalando nuestros sectores productivos y apostando por una
formación que fortalezca nuestra competitividad. Una apuesta por el talento en
un marco educativo alejado del sesgo ideológico y dentro de un gran pacto de
Estado. Nuestra verdadera fortaleza y todo un activo para subirse al tren de la
revolución tecnológica y digital de esta nueva era de la economÃa disruptiva.
Vienen tiempos recios, pero en el Partido Popular estamos
preparados. Con las "ces del PP", Pablo Casado nos presenta un algoritmo que es
garantÃa de éxito: credibilidad, confianza, coherencia, certidumbre y
centralidad. Un mensaje desde la moderación y la responsabilidad de un partido
de gobierno consciente de las dificultades que se avecinan. Tenemos la
experiencia y las recetas que funcionan y que ahora volvemos a necesitar apara
Activar España con Europa, desde Valencia.