Hermanos. FOTO MEDIASET Anoche llegó a
nuestras pantallas uno de los estrenos más publicitados por T5 para esta nueva
temporada, la miniserie de 6 capítulos Hermanos. Y tal como se estrenó,
decepcionó, así de rápido. Y ya no solo
a un buen número de seguidores que en las redes sociales mostraban su descontento
ante la nueva ficción de la cadena que sí que llegó a ser TT en Twitter. Los
errores de localización, el argumento tedioso y alguna que otra actuación
mediocre, terminaron por desinflar el globo que tanto había hinchado la cadena en
sus promociones.
La audiencia
tampoco ha destacado y no se llega a entender, además se emitió prácticamente
sin anuncios. Hermanos de T5 una serie mojabragas, de las que de tanto en tanto
les gusta emitir a las cadenas en nuestro país. Ya se sabe: protagonistas
macizos que intentan camuflar un producto bastante simple y poco atractivo para
así reventar las audiencias. Y es que Hermanos sí tuvo una audiencia femenina
destacada que pudo ver como a los 20 minutos sus protagonistas ya estaban
enseñando cuerpos y tetas borrachos en una piscina. Exigencias del guión pero
¿y de la historia? Había que mostrar carnaza sí o sí y mantener el share.
La serie es
pretenciosa desde el minuto uno y la historia termina desinflándose. Las tramas
se alargan innecesariamente y eso, para ser sol el primer capítulo, es una muy
mala señal. Virginia ( María Valverde), Juan (Antonio Velázquez) y Alberto (
Álvaro Cervantes) protagonizan este viaje con cierta mezcla de la movida
madrileña versus Cuéntame. Un triángulo amoroso que es, solamente, el único
reclamo del que prometía ser uno de los grandes estreno de ficción de la
temporada. Un guión irrelevante con una
historia que no llega a atrapar a la audiencia y, por último, las actuaciones
donde el único que se salva es Álvaro Cervantes, que interpreta a un joven inteligente
y seductor que trata de situarse en la cima del poder gracias a su desmedida
ambición. Álvaro Cervantes ya demostró en otros papeles de cine y televisión
que es uno de los actores menos valorados de este país y debería copar más
proyectos y más guiones interesantes. Antonio Velázquez funciona a medio gas,
pero la que falla es María Valverde, donde aún se sigue esperando un papel suyo
relevante y eso que ya lleva unos cuantos años en la profesión. No todo es el
físico…
En los próximos capítulos
-miedo da-, tratarán de forma contextual algunos hechos históricos que, sin
duda, serán amenizados con más posados en bóxers y sujetador mostrando
cuerpazos con tal de retener a una audiencia que, parece, no cree que este sea
el único motivo para ver una serie. Quedó cerca en audiencia de la siempre
exitosa película Colombiana y de la serie con ángel, Vivo Cantando, que ha
bajado 2 puntos respecto la temporada pasada. La semana que viene será la
prueba de fuego de ambas ficciones. Si Vivo Cantando baja, optaría por
cambiarla como movimiento casi histórico
al prime time de los viernes (ya no hay más huecos), pero veremos si las malas
críticas de Hermanos alentadas por las redes sociales hacen mella o no y si
consigue mantenerse, remontar o baja en sucesivas semanas favoreciendo el
ascenso de la competencia. De momento, Hermanos suspende en calidad y aprueba,
por la mínima, en audiencias.
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