Los
288 alumnos y alumnas del colegio Ausiàs March de Sagunto no han
podido asistir hoy a sus clases después de que la dirección del
centro decidiera cerrar la escuela ante un foco de legionella en la
cañería. Al principio de la mañana, el centro había comunicado a
los padres que existía una avería en el suministro de agua
corriente, pero más tarde saltaba la voz de alarma al informar sobre
la aparición de un foco de legionelosis en una de las cañerías de
la escuela.
Según
ha comunicado el edil de Aguas del Ayuntamiento de Sagunto, Sergio
Muniesa, la incidencia se detectó cuando el Ayuntamiento llevó a
cabo los controles de prevención que se realizan todos los años en
este tipo de instalaciones. "Los técnicos detectaron un punto
afectado e inmediatamente se activó el protocolo de prevención",
ha matizado Muniesa.
Además,
y para la tranquilidad de los padres y las madres de los alumnos y
alumnas del colegio Ausiàs March de Saguntol, el brote registrado
"no es la famosa legionella de tipo 1 que produce neumonía,
sino que es del grupo 2 y, en principio, no tiene ningún tipo de
afección a las personas", ha destacado el concejal de Aguas.
Así
mismo, Muniesa y la edila de Educación, Maribel Sáez, han explicado
que tras tomar la decisión de cerrar la acometida por prevención,
"desde las cinco de la mañana se está llevando agua
embotellada al centro para que pudiera funcionar con normalidad".
No obstante, la dirección del colegio "ha decidido cerrar el
centro no siguiendo el protocolo establecido y creando una alarma
innecesaria, porque ya estaba activado el protocolo y se había
llevado agua embotellada".
De
hecho, Sáez ha afirmado que mañana la escuela abrirá sus puertas
después de que el Ayuntamiento haya puesto en marcha el plan de
choque con un tratamiento de hipercloración y revisar todas las
instalaciones. "Los medios de control han sido eficaces y el
sistema ha funcionado correctamente", ha subrayado Muniesa.
Por
su parte, la directora del colegio Ausiàs March de Sagunto ha
comunicado que hasta el momento no han recibido ninguna notificación
oficial del Ayuntamiento sobre la detección de un foco de legionella
en las instalaciones del centro. "Sólo nos han llamado los
técnicos para informarnos de que iban a cortar el agua, y un correo
de la empresa, que ha llegado esta misma manaña, informándonos
sobre la legionella", explica.
La
dirección del centro decide cerrar la escuela ante la falta de agua
corriente para los 288 alumnos y alumnas de la escuela. Además, la
directora ha matizado que el Ayuntamiento "sólo nos ha hecho
llegar 20 garrafas de 10 litros de agua potable sin ningún tipo de
dosificador para dar de beber a los niños".
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