Manuel Martínez Sospedra. EPDA
Federico Varona. EPDA
Los andaluces han puesto patas
arriba el tablero político español. Analizamos la eclosión de Vox y la debacle
socialista con el catedrático de Derecho Constitucional de la Universidad
Cardenal Herrera-CEU Manuel Martínez Sospedra y el economista Federico Varona.
El mapa electoral andaluz no es
extrapolable a la Comunitat Valenciana, donde “no es imposible que Ximo Puig
siga siendo el presidente pero con otros socios si los números le dan,
concretamente Ciudadanos”. El PP debe volver al centro para no presentarse como
“la copia de Vox, un partido que no será insignificante pero tampoco importante.
Es una estrategia suicida emularlo”. Y el presidente del Gobierno, Pedro
Sánchez, debería convocar un súper domingo porque “cuanto más tarde, más
difícil le resultará salvar los muebles con un socio principal, Podemos, que no
es su competidor sino su enemigo y cuyo éxito político es destruirlo o
subordinarlo”, defiende Martínez Sospedra.
¿Y qué efectos generan las
elecciones andaluzas en la economía? “Una bajada de impuestos no es aplicable
en el corto plazo pero sí lo es corregir el dumping fiscal para que todos los
españoles paguen lo mismo vivan donde vivan”. La eclosión de Vox, advierte
Varona, “es una cucharada más de azúcar en la inestabilidad que retrae la inversión
extranjera”.
¿Los resultados de las elecciones andaluzas son extrapolables a la
Comunitat Valenciana?
No. Aquí no existe un gobierno
que lleve 40 años sin alternancia con los efectos perversos que eso produce.
Tampoco hay el grave problema de recepción de inmigración ilegal. Sí es común
el anticatalanismo con una versión étnica del nacionalismo español, el rechazo
a ciertos tipos de inmigración y la preferencia nacional. ¿Qué puede ocurrir?
No se sabe. Si en mayo sólo hay elecciones municipales, autonómicas y europeas,
Vox tendría más posibilidades de obtener buenos resultados. Si finalmente se
produce un súper domingo, a Vox le iría peor porque las legislativas tirarían
del voto en la urna europea, municipal y autonómica.
No parece que Sánchez vaya a adelantar elecciones.
El tiempo juega en su contra
desde el principio y cuanto más tarde, más difícil tendrá salvar los muebles.
No creo que exista posibilidad política de prolongar la situación de un
gobierno con apoyo de menos de una cuarta parte del Congreso, que es incapaz de
aprobar unos presupuestos y que no puede contar con sus socios. Encima, su apoyo
principal, Podemos, defiende como su éxito político la destrucción del PSOE.
Pensar en agotar la legislatura así es estar fuera de este mundo. La decisión
racional, si pueden aguantar, es hacer un súper domingo. La duda es si puede
llegar hasta mayo o se ve forzado a convocar entre finales de este mes y
mediados de enero para hacerlas en marzo. Hay un 60% de probabilidades de que
haya un súper domingo, entre un 15 y un 20% de aguantar hasta otoño y entre un
10 y un 15% que convoque a mediados de enero como tope.
¿Se reeditará el Pacto del Botánico?
Depende de los números pero si
salen, los socialistas cambiarán de
socio. Si tuviera que apostar, lo haría por una coalición entre el PSOE y
Ciudadanos y no descartemos que algo parecido, vestido de otra manera, acabe
pasando en Andalucía. Hablarán las urnas pero no veo imposible que Puig siga
siendo el president de la Generalitat.
¿Dejar a Oltra en la oposición?
Sí, sí, exactamente así.
Compromís cometió en su día un error estratégico. Tenía la posibilidad de
convertirse en algo parecido a un partido nacional valenciano, atrayendo a las
clases medidas urbanas y cuando tuvo que decidir si concurría en coalición con
Podemos, se equivocó y se ha autocondenado a ser un híbrido entre el populismo
y el nacionalismo. En estas condiciones, es difícil poder aspirar a ser el
partido más votado en la Comunitat Valenciana.
¿Y en Valencia ciudad?
No veo el cambio tampoco. Para
ser exactos, no creo que el PSOE pueda formar mayoría solo o con Ciudadanos
porque ambas formaciones tienen un problema estructural y es que en la ciudad
son extremadamente débiles y en estas condiciones es complicado obtener un buen
resultado aunque se tenga un buen candidato. Si, además, no se tiene, las cosas
se complican más. Es posible que continuara algo parecido en el Ayuntamiento de
Valencia.
Si Podemos quiere engullir al PSOE, su situación de cara a establecer
pactos es endiablada.
El éxito de Podemos exige la
destrucción del PSOE o, como mínimo, la subordinación al caudillaje del partido
populista. No es que lo diga yo sino que lo dijo el señor Iglesias que aspira a
ser una especie de peronismo español importando las técnicas del populismo
sudamericano. A mí no me parece un proyecto político viable pero es el de
Podemos. Podemos es un enemigo para el PSOE y no un competidor como sí lo son
Ciudadanos, PP y Vox. Además, el PSOE tiene un problema común a la
socialdemocracia europea: no tiene un proyecto político reconocible y, claro,
así difícilmente puede ofrecer un programa particular. Tiene un futuro
problemático. Un partido socialista sin socialismo no puede vivir a la larga.
Debe ver qué son y qué venden.
¿Al PSOE le interesa más un socio como Ciudadanos?
Las relaciones serían menos
conflictivas y el grado de coincidencia política sería igual o mayor.
¿Vox es un partido de extrema derecha?
Las amistades son las que son y
estamos ante un partido que se inscribe en una corriente ampliamente difundida
en Europa que se alimenta de la nostalgia del estado nacional y predica una
especie de nacionalismo identitario. No es un partido fascista, eso sí. Uno de
los problemas crónicos de la izquierda es tratar de entender el nacionalismo
populista como una reedición del fascismo o del franquismo y no tiene que ver
una cosa con la otra. Es un fenómeno nuevo y distinto de derecha radical.
¿Cómo se explica su eclosión?
En el caso andaluz, por el
decantamiento de un sector del electorado: entre 8 y 9 son antiguos votantes
del PP. Lo que pierde el PP es lo que gana Vox. Además, es más complicado
porque hay voto no conservador por el fenómeno de cansancio y descontento. Ha
llegado a recoger apoyos de Podemos en escasa cantidad, pero significativa, y
este trasvase se ha producido en los últimos 3 días de campaña. Entonces
decimos que han fallado las encuestas pero hay que tener en cuenta que las que se
pueden publicar se hacen como tarde entre 10 y 8 días antes de las elecciones y
entonces había un 25% de indecisos. En ese momento, son incapaces de enviar el
mensaje de que algo está cambiando. El
tiempo dirá si Vox será capaz o no de retener ese voto.
¿Los pactos de Pedro Sánchez con Podemos e independentistas explican la
debacle socialista?
No tienen la relevancia que se le
ha dado pero sí hay una imagen especulada del nacionalismo catalán, versión
Puigdemont, en un nacionalismo español. El motor fundamental es el nacionalismo
étnico. La estructura mental es extraordinariamente similar y esto es lo nuevo
y aproxima a Vox al Frente Nacional Francés, a Alternativa por Alemania… En el
caso de Andalucía, la variable principal que explica el fracaso socialista es
la abstención de su electorado. El gobierno de la señora Díaz ha sido
manifiestamente mejorable y ha introducido un factor nuevo que es una aguda
división entre incondicionales y no incondicionales a su figura. Hay un factor
general de cansancio porque hasta el domingo el PSOE andaluz era una anamolía
democrática al llevar casi 40 años gobernando ininterrumpidamente. Sólo hay un
caso similar en Europa y esto genera un caldo de cultivo con mala gestión,
clientelismo y corrupción y llega un momento que la gente se harta. ¿Y por qué
no ha subido el PP? Porque los ciudadanos han expresado su voluntad de que esto
cambiara.
¿El PP tiene que girar a la derecha o virar al centro?
Se equivoca yendo a la derecha.
Vox pretende suprimir las autonomías, que es una postura que defiende entre el
18 y el 20% de la población en las encuestas. Y el PP a continuación llega y
dice que va a recentralizar. Pues ¿qué quiere que le diga? Aparece como la
copia. ¿El elector normal elige al original o la copia? Es una estrategia
suicida que además fractura al PP.
¿Los populares seguirán siendo el más votado en el centro derecha?
Sí pero para tener posibilidades
reales de ser el más votado dependerá de la orientación política de la
dirección del PP. El campo de crecimiento de Vox no es grande y sólo puede
crecer captando votos de otros populistas y del PP. No hay más. En Europa no
hay ningún caso en que un partido de extrema derecha se haya comido al
conservador existente.
¿Qué futuro le aguarda a Vox?
El tema andaluz trae preocupación
a los demás partidos porque hasta ahora éramos una anomalía en la Europa
occidental. El recorrido con las propuestas de Vox será reducido. No será un
partido insignificante pero tampoco importante. Será incordiante y molesto.
FEDERICO VARONA: ''ME GUSTARÍA VIVIR SIN IMPUESTOS PERO ES IMPOSIBLE''
Vox ha irrumpido con fuerza en el
Parlamento andaluz con “medidas económicas muy impactantes pero sin un plan
económico sólido. A todos nos gustaría vivir sin pagar impuestos pero es
imposible”, advierte el asesor fiscal Federico Varona. Las bajadas
generalizadas que prometen en su programa electoral de IRPF e Impuesto de
Sociedades son, en el corto plazo, “de difícil aplicación”. Quieren seguir la
conocida como teoría de la servilleta que aplicó Ronald Reagan en EEUU: “Cuando
bajas la presión fiscal, aumentas la recaudación porque a partir de una cifra,
no compensa defraudar. Es decir, si el IVA es inferior al 21% actual, habría
menos economía sumergida porque la gente pagaría”, explica Federico Varona.
El programa económico de los de
Abascal sí recoge otras promesas “viables en el corte plazo y entendibles como
corregir el dumping fiscal del que habla Mónica Oltra: que todos los españoles
paguemos los mismos impuestos vivamos donde vivamos y que no es ni más ni menos
que respetar el precepto constitucional de igualdad entre españoles”.
Más allá de los anuncios de Vox,
¿unos resultados tan inesperados aumentan la inestabilidad económica? Responde
Varona: “El que manda, Pedro Sánchez, tiene 84 votos y sus socios están
apoyados por Venezuela y por partidos con dirigentes o bien en la cárcel o bien
huidos. Además, debemos el 100% del PIB, tenemos un 15% de paro… A ello sumemos
la cucharada de azúcar que ha puesto Andalucía”.
Federico Varona reitera: “España
no presenta suficiente estabilidad para invertir y el mercado no quiere
extremos. A nuestra economía le falta confianza, muy dañada después del cambio
de la legislación en energías renovables en 2010. Tú no puedes cambiar las
reglas del juego a mitad de partido”.
Comparte la noticia
Categorías de la noticia